EL
NACIONAL - Domingo 22 de Enero de 2012
Empleando a fondo el poderoso conjunto que hace confluir la voluntad
democrática y plural, el invariable apego a la naturaleza autonómica de su
existencia y legado, así como la integración de sus estructuras rectorales,
decanales y electorales alrededor del propósito común del ejercicio fiel del
Estado de Derecho, los valerosos estudiantes ucevistas triunfaron por sólida e
incuestionable mayoría en la elección de nuevas voces de cogobierno y en la
selección de compañeros de estudios que integrarán en breve las directivas de
la FCU y de los centros de estudiantes de todas nuestras escuelas.
Aunque el "estado de sitio" impuesto por la falange chavista recurrió repetidamente al intento de saboteo y de actos violentos cargados de mala fe, con las extraordinarias victorias en Comunicación y en Trabajo Social que sellaron los comicios estudiantiles la UCV se empina aún más en la cima como la institución venezolana de más alta credibilidad para enviar un mensaje firme y claro a la sociedad civil venezolana: unidos y dispuestos a enfrentar con la vida, nos proponemos reconquistar la democracia y derrotar el vicariante mandato del militarismo chavista.
Ese histórico día miércoles 18 de enero, mientras los estudiantes democráticos solidificaron la victoria en un proceso electoral impecable, el Consejo Universitario rechazaba contundentemente la conseja bastarda del estudiante expulsado de un nuevo intento difamatorio en contra de la rectora García Arocha Márquez.
En esa misma sesión, expresando la honorabilidad y el decoro que le es inherente, la UCV rindió homenaje póstumo al profesor Gustavo Díaz Solís, insigne hombre de letras y ucevista de corazón, mientras revisamos el sostenido avance de la innovación y el emprendimiento de la nueva academia ucevista.
Es este dinámico devenir el mejor aporte que ofrece la UCV para incentivar la más amplia participación de la sociedad civil en las venideras primarias, convocadas por la Venezuela democrática para seleccionar al candidato a ejercer la Presidencia de la República, una vez que obtenga la victoria en las presidenciales del 7 de octubre.
Anticipamos que la participación abrumadora en las primarias permitirá proveer una mayor confianza y legitimación internacional. El resultado victorioso de la democracia en nuestro país es esperado con interés genuino por sectores institucionales y políticos a escala internacional que se opondrán a la instigación golpista y a los intentos que pudieran generarse con el fatídico propósito de desconocer la voluntad mayoritaria del pueblo venezolano.
El nuevo gobierno debe trabajar incansablemente para priorizar con sólido conocimiento, las acciones y decisiones que atenúen el grave sufrimiento social, la descomunal destrucción estructural que hemos de encontrar al recuperar el control y la operatividad de nuestras grandes estructuras, y la bancarrota del sistema económico. El sector privado debe combinar aporte y recuperación. Las fuerzas armadas institucionales deberán asumir todo tipo de misiones de alto riesgo. Hemos de afrontar la delincuencia organizada trasnacional y las bandas terroristas en las fronteras, costas y en los cordones de miseria donde habitan siete de cada diez conciudadanos.
Al felicitar a nuestros estudiantes los exhortamos a que sean un impulso multiplicador en la excepcional misión de reconstruir nuestra nación.
Aunque el "estado de sitio" impuesto por la falange chavista recurrió repetidamente al intento de saboteo y de actos violentos cargados de mala fe, con las extraordinarias victorias en Comunicación y en Trabajo Social que sellaron los comicios estudiantiles la UCV se empina aún más en la cima como la institución venezolana de más alta credibilidad para enviar un mensaje firme y claro a la sociedad civil venezolana: unidos y dispuestos a enfrentar con la vida, nos proponemos reconquistar la democracia y derrotar el vicariante mandato del militarismo chavista.
Ese histórico día miércoles 18 de enero, mientras los estudiantes democráticos solidificaron la victoria en un proceso electoral impecable, el Consejo Universitario rechazaba contundentemente la conseja bastarda del estudiante expulsado de un nuevo intento difamatorio en contra de la rectora García Arocha Márquez.
En esa misma sesión, expresando la honorabilidad y el decoro que le es inherente, la UCV rindió homenaje póstumo al profesor Gustavo Díaz Solís, insigne hombre de letras y ucevista de corazón, mientras revisamos el sostenido avance de la innovación y el emprendimiento de la nueva academia ucevista.
Es este dinámico devenir el mejor aporte que ofrece la UCV para incentivar la más amplia participación de la sociedad civil en las venideras primarias, convocadas por la Venezuela democrática para seleccionar al candidato a ejercer la Presidencia de la República, una vez que obtenga la victoria en las presidenciales del 7 de octubre.
Anticipamos que la participación abrumadora en las primarias permitirá proveer una mayor confianza y legitimación internacional. El resultado victorioso de la democracia en nuestro país es esperado con interés genuino por sectores institucionales y políticos a escala internacional que se opondrán a la instigación golpista y a los intentos que pudieran generarse con el fatídico propósito de desconocer la voluntad mayoritaria del pueblo venezolano.
El nuevo gobierno debe trabajar incansablemente para priorizar con sólido conocimiento, las acciones y decisiones que atenúen el grave sufrimiento social, la descomunal destrucción estructural que hemos de encontrar al recuperar el control y la operatividad de nuestras grandes estructuras, y la bancarrota del sistema económico. El sector privado debe combinar aporte y recuperación. Las fuerzas armadas institucionales deberán asumir todo tipo de misiones de alto riesgo. Hemos de afrontar la delincuencia organizada trasnacional y las bandas terroristas en las fronteras, costas y en los cordones de miseria donde habitan siete de cada diez conciudadanos.
Al felicitar a nuestros estudiantes los exhortamos a que sean un impulso multiplicador en la excepcional misión de reconstruir nuestra nación.
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